Álvaro Ramírez

12 -22-2016

Mi nombre es Álvaro Ramírez. Vengo de Santo Domingo. Y trabajé, primero

cuando llegué es en el ‘90. Trabajé una factoría, duré 3 años en la factoría.

Salí por falta-- no pagaban bien. No pagaban bien, salí, hice el curso de

home attendant. Duré dos meses, hice cursos, y busqué trabajo en la

agencia, First Chinese. Allí empecé trabajando 24 horas. De las 24 horas

acaso pagaban 13. No pagaban las 24 completas. Pasando mucho en la

casa del cliente, en la calle, aguantando muchas cosas tanto del paciente

como de la familia del paciente. Dicen que se duerme pero no se duerme,

mentira. Allí no… 24 no es para dormir no se duerme, porque hay que estar

pendiente al paciente, y estar con su medicina y de diferentes horas, y en

realidad no se duerme. Entonces estamos tratando de ver ya eso, ese dinero

perdido estamos tratando de recuperar. Los chavos que estamos perdidos,

las horas que nos quitaron, que nos robaron. De 24 horas, pagando 13. Es

mucha la que se quedan con ella. No pagan. Entonces estamos luchando y

tratando, aunque no, por ejemplo, me pagan a mí, si otros resuelven, puede

uno se conforme.

Se dice la unión hace la fuerza. Seguir adelante. Estoy trabajando para

United Jewish Council, allí trabajé 24 horas también. El mismo problema, la

unión dice una cosa, pero ellos dicen otra. Ofrecen, pero nunca llega lo que

ofrecen. Entonces uno trabaja por lo mismo chavo, por lo mismo dinero, y no

entramos en ningún acuerdo. Entonces esperamos resolver, aquí con esta

organización [NMASS], y ya lo que está adelante, esperar de terminar, y

seguir luchando por los demás.

Factoría: Eso era [una factoría de] herramientas. Materiales de ferretería. Yo

empacaba herramientas, diferentes herramientas. Yo trabajaba de 8, a cuatro

y media. De lunes a viernes. Salí buscando otras opciones. Y caí haciendo

curso de home attendant. [La factoría] estaba pagando el mínimo, no menos.

Ahora me pagan menos. Así, como se dice, que hace más pero se

hace menos. Yo ganaba menos y hacia más que con lo que te ganaba?

ahora. Mas horas pero menos chavo. Es muy irónico, es duro.

No pensé [en regresar a la factoría], en realidad yo salí, si lo hubiese

pensado quizás, me quedo en la cosa, en la factoría, y hago el curso, y podía

trabajar sábado y domingo. Pero no pensé, entonces salí radicalmente la

factoría. Después pensé pero ya estaba afuera. Entonces lo que hice es …

trabajar en diferentes agencias. Pero que toda es la misma porque a veces

uno recomienda una agencia “Ay esa es una buena agencia,” pero que allí es

la misma cosa. Toda depende de la unión y todo es lo mismo. No pagan lo

que tienen que pagar. [La unión es] la 1199.

Hay que hacer la fuerza pero esta unión no hace fuerza. No resuelve.

Cuando hacemos [xyz] en la agencia, reuniones, ellos le ofrecen muchas

cosas a uno. Pero al final uno va a buscarlas, y no se la consigue, y se la

consigues pasar demasiado trabajo. Entonces en realidad uno no ve donde

está la unión.

Se dice que uno nunca puede hacerlo solo. Si uno consigue ayuda por

otro lado, y yo llegué aquí por una opción, y me ha quedado porque me gusta

mucho lo que hacen aquí, la información que dan aquí. Y como se dicen la

unión hace la fuerza. Si nos juntamos y nos escuchamos más, podemos

tener otra cosa, ganar otras soluciones, y ayudarnos unos a los otros.

Pienso hacer otra cosa, porque veo que no mejora. Si mejora está

bien, si mejora yo puedo seguir, pero si va como está, no. No vale la pena.

No trabajo, siempre no hay, que no hay. De verdad no.

El cliente que yo tenía porque hubo uno que se murió en mayo, él tuvo

diabetes. Tenía problema de riñones. Tenía ulceras abiertas. Y tenía muchas

complicaciones. Hubiese dado un stroke. Era un paciente de cama. Yo tenía

que hacer la comida, el desayuno, llevársela a la cama su café, de la noche

su cena. Algo muy importante estar pendiente a sus medicamentos, las 24

horas. Usaba Pampers. Para bañar a una persona de cama, hay que ayuda,

pero hay otros que no.

Es difícil. Son 24 horas, entonces no vale la pena, no le conviene a

uno. Uno lo hace, porque no hay otra cosa. Y uno [¿?] para ganar un peso

más. Pero no conviene, de verdad que no. Si la cosa mejora, y uno ve que

hay más money, y uno dice “Voy a trabajar 3 días de 24, y uno resuelve, pero

a según está la cosa, no vale la pena.

Antes yo trabajaba los 5 días, de 24 horas, trabajaba con ese paciente.

Siempre yo estaba en la calle, en la casa del cliente. Y a veces tuve tiempo

de salir a uno y entrar a otro. Que ni iba a la casa.

La mayoría de mi familia, mi papa y mi mamá, los hermanos ya

estaban aquí. Y ya cuando llegué gracias a diós, mi familia ya estaba aquí.

Fue un poquito mejor, cuando llegues y tu familia ya está aquí.

Algunos [compañeros] con lo que hablamos, unos que están retirados,

algunos estamos luchando por la misma causa que el problema de First

Chinese. Siempre estamos en comunicación, si hay reunión aquí yo les

invito. Nos ajuntamos, y estamos regando la voz, y estamos luchando y

buscando mejores soluciones.

Cuando trabajábamos en la agencia, cuando hacíamos “In Service”

[entrenamiento].